Resumen: ¿Qué significa en la práctica “las personas en el centro de la estrategia” respecto de los consumidores y los empleados ? ¿Qué tiene que ver esto con la forma de maximizar ganancias hoy en los negocios?
Las exigencias de los consumidores están en un punto muy alto, les piden a las empresas que transparenten procesos de trabajo y tengan una postura clara ante temas sociales, ambientales, de género y hasta políticos para entender quiénes son y luego decidir si se unen a ellas comprando sus productos. A esto se suma el nuevo activismo de los empleados que no están dispuestos a trabajar en empresas que no consideren seriamente la diversidad, la equidad, la inclusión y pertenencia (DEI&B) dentro de sus prioridades. Los colaboradores hoy están pidiendo que los vean y reconozcan de forma interseccional, es decir, como seres individuales con distintos hábitos, intereses y problemáticas y que no los identifiquen solo con su puesto de trabajo. Esta situación modifica el contexto laboral y la cultura de las empresas de forma radical. La transformación se acelera aun más a medida que se incorporan personas de la generación z a los nuevos puestos de trabajo y al mercado de consumo, ellos son quiénes están llevando fuertemente esta iniciativa adelante. En Europa y Estados Unidos ya existe el puesto CDO (Chief Diveristy Officer) y los bonos de los CEO´s de empresas como Apple, Mc Donad´s, American Express y Starbucks están sujetos al desempeño de este sector. En América Latina es una conversación que recién se está generando y debemos prestarle especial atención para entender qué desiciones estratégicas debemos tomar de cara al futuro.
En sintonía con este movimiento social que da nueva forma a la gestión en las empresas, comienzan a aparecer plataformas y servicios que refuerzan este cambio y abren nuevas dimensiones tanto para las empresas como para las personas. Pineapple es una nueva plataforma de profesionales diseñada para la generación Z. Lanzada este mes, la aplicación permite a los usuarios mostrar su experiencia, proyectos, creatividad y fortalezas mediante un perfil visual. La aplicación fue creada por el genZ David Diamond y tiene como objetivo fomentar conexiones significativas entre los usuarios al unir la posición profesional de LinkedIn con la plataforma creativa de Instagram. En su sitio lo describe muy claramente: “Pinapple es como si LinkedIn e Instagram hubiesen tenido un bebé”. La plataforma también fomenta comunidades formales dentro de la aplicación donde los usuarios pueden tener “Jams” o hilos para discutir temas de interés y forjar conexiones más profundas.
El modelo de negocio de Pinapple parte de la lógica “las personas en el centro de la estrategia”. Diamond afirma: La misión de Pineapple es servir a nuestra comunidad de personas ambiciosas de la generación Z que están listas para hacer cambios en su carrera. Mostramos tu individualidad y hacemos de *vos* el centro de tu carrera.
Otra empresa que comprende el cambio de paradigma es Maslow, la nueva startup de RRHH de Matias Botbol (creador de Taringa) que se centra en solucionar el problema de la pérdida de talento que sufren casi todas las empresas hoy. Matías explica que la raíz del problema es que “el funcionamiento de las compensaciones y la negociación de los salarios son iguales que hace 100 años”. El proyecto comenzó a desarrollarse en marzo con el objetivo de pensar un producto que se le pueda vender a las empresas para solucionar este problema de retención de talento.”Maslow es la respuesta a esa búsqueda”, cuenta Botbol y suma: “Es la herramienta que está ayudando a las empresas a ofrecer compensaciones, incentivos y beneficios elegidos directamente por sus colaboradores. La idea es crear un mundo en donde cada uno elija cómo ser compensado por su trabajo”.
La propuesta se centra en tres pilares: un sistema de planeamiento para poder ofrecer compensaciones variables en una misma empresa; un canal de diálogo entre empleados y empresas sobre los beneficios que se pueden ofrecer y un marketplace donde los empleados pueden elegir la compensación que más les sirve. “El marketplace es igual para todos los empleados, con la diferencia de que cada empresa puede decidir cuáles beneficios ofrecer y cuáles no” y añade: “Los empleados eligen en el portal las compensaciones que más les sirven de las disponibles, volviendo el proceso más ágil, personalizado y sencillo”.
¿Qué es lo importante de esto?
Estas iniciativas, Pinapple y Maslow, relacionadas exclusivamente al campo de los recursos humanos, son solo uno de los numerosos movimientos que están teniendo lugar en todos los sectores de las industrias y que las empresas necesitan comprender profundamente: el del rol central de las personas en la estrategia.
Este nuevo paradigma necesita ser abarcado multidimensionalmente por las compañías, no como una acción de marketing o una cuestión de RSE sino como un cambio cultural que se inicia desde el CEO y derramará en toda la empresa un nuevo mindset para reaprender el negocio y así maximizar ganancias.Otra cuestión que queda al descubierto en estos dos casos es que las empresas deben estar moviéndose constantemente (en beta) en pos de mejorar su modelo de negocio en función de las nuevas demandas para evitar su obsolescencia. LinkedIn, una empresa lenta en sus movimientos, dejó aquí un espacio fértil para que nuevos competidores más atentos a las cambiantes demandas desarrollen productos específicos y le quiten mercado. Esta lentitud hoy las empresas de todos los rubros la pagan muy cara. No es seguro que el cambio genere éxito, pero quedarse quieto en una época de permanentes transformaciones es un pasaje directo al fracaso.
Cuando en negocios decimos que para maximizar ganancias las empresas deben colocar a las personas en el centro de la estrategia es algo más que una declaración políticamente correcta o una cuestión de formas. Concretamente, deben pensar en resolver problemas (poner en el centro a las personas) y quitar de allí la creación (productos). Esta es la única manera que las empresas van a poder sobrevivir en el nuevo paradigma. Tanto si venden prendas, productos de beauty o servicios de tecnología la lógica es similar porque estamos en un cambio de paradigma y todo lo que conocíamos hasta ahora para gestionar nuestras empresas debemos dejarlo atrás para poder avanzar. Al igual que con el surgimiento de la revolución industrial quedaron atrás los principios del modelo agrario, hoy debemos desacoplarnos de lo que nos generó éxito en el pasado (tácticas, tipo de gestión, estrategia, razonamientos, estructuras) para avanzar en esta nueva era. No es una cuestión de curiosidad, sino de supervivencia.
Muchas veces las empresas terminan discutiendo a favor o en contra de su statu quo en lugar del problema que podrían solucionar y se quedan estancadas en ese loop. Personalmente he visto interminables discusiones y excusas cuando se plantean nuevas ideas. El desafío está en tener claro que debemos tomar partido para avanzar y hacerlo sobre los efectos, no sobre la conexión emocional o el miedo que el cambio genera en nosotros o en nuestro equipo.