Las marcas no explotan, se derriten. Hugo Boss lo sabe. La empresa alemana mantuvo una sostenida y constante caída desde 2012 a 2020, año en el que perdió 2000 millones de dólares y tocó fondo. Fue ahí cuando contrató Daniel Grieder, ex director ejecutivo de Tommy Hilfiger, para rearmar su negocio. Grieder con su experiencia y mirada holística presentó un plan muy ambicioso de varios años en 2021 y ya a fines de 2022 la marca comenzó a ver aumentos en sus ganancias. Pero quedó un detalle: mejorar la conexión emocional y la materialización del aspecto intangible de Boss para conectar correctamente con los exigentes millenials. En 2023 por fin perfeccionó la comunicación de su marca con la misma fórmula de storytelling que utilizan Nike y Apple entre otras. Un plan perfecto que, de sostenerse y profundizarse en el tiempo, llevará la marca a otro nivel de conexión con sus clientes y aumentará su predisposición a pagar.